Díptico de Federico de Montefeltro, duque de Urbino pintado por Piero della Francesca.
Los Montefeltro
Montefeltro es el apellido de una histórica familia italiana que gobernó en Urbino y Rimini.[1] El gobierno de la familia empezó en 1226 cuando Buonconte I da Montefeltro y su hermano Taddeo fueron nombrados condes de Urbino por el emperador Federico II. Ellos y su descendencia fueron líderes gibelinos de las Marcas y la Romaña.
Uno de los integrantes más destacados de la familia fue Federico da Montefeltro, también conocido como Federico III da Montefeltro (7 de junio de 1422 – † 10 de septiembre de 1482), fue uno de los más exitosos condottieri del Renacimiento italiano, y Duque de Urbino desde 1444 hasta su muerte.
En Urbino encargó la construcción de una gran biblioteca, quizá la mayor de Italia después de la Biblioteca Apostólica Vaticana, con su propio equipo de escribientes, y organizó alrededor de él una corte humanística en una de las grandes joyas arquitectónicas del renacimiento temprano, el Palacio ducal de Urbino, diseñado por el teórico y arquitecto Francesco di Giorgio Martini.
Federico de Montefeltro era también un humanista y un mecenas que convirtió su ducado de Urbino en un referente cultural de la época. Uno de los pintores que tenía a sueldo era Piero della Francesca, que retrató al condottiere y a su segunda esposa en este famoso díptico que reproducimos parcialmente a continuación.
En 1460 Federico se casó con Battista Sforza hija de Alesandro Sforza, duque de Pésaro, amigo y aliado político durante años. Mujer de gran inteligencia, durante toda su vida Battista supo estar a la altura de sus tareas, sobre todo cuando tenía que representar a su marido durante sus largos períodos de ausencia. Battista murió en 1472 dando a luz al tan deseado heredero Guidobaldo.[2] La noticia le llegó a Federico mientras estaba en Florencia celebrando una de sus mejores victorias militares por cuenta de los Médicis, la toma de Volterra.
Federico y más tarde su hijo Guidobaldo di Montefeltro, protegieron a Rafael. Bajo Federico, Urbino se convirtió en pocos años en un extraordinario centro intelectual y artístico con pintores como Piero della Francesca, Paolo Uccello, Melozzo da Forli, Justo de Gante, Pedro Berruguete; escritores como Baldassarre Castiglione y Pietro Bembo; arquitectos como León Battista Alberti, Luciano Laurana y Francesco di Giorgio durante su estancia en la ciudad matemática y matemáticos como Luca Pacioli y Paulus von Middelburg, poetas y músicos como Ottaviano Petrucci. El gran Rafael nacido en Urbino siendo su padre Giovanni Santi pintor de la corte, nunca olvidará su ciudad natal.[3]
Federico da Montefeltro hizo construir dos studioli, uno en el Palacio Ducal de Urbino, ciudad que formaba parte de los Estados Pontificios y otro en su ciudad natal de Gubbio, también perteneciente a esta jurisdicción.[4] Además, su hijo Guidobaldo también dispuso de un espacio no menos importante dentro del Palacio, como es el caso del conocido como Tempietto delle Muse (pintado por Giovanni Santi, una pequeña estancia posiblemente utilizada como studiolo contigua a la Capilla de la Absolución en la que se representaban las musas con atributos musicales.
El complejo programa decorativo de esta pieza parece reflejar las preocupaciones humanas e intelectuales de su ilustre comitente. En un registro inferior, las paredes se recubrieron de admirables marqueterías de madera, y en el registro superior, se dispusieron 28 retratos de hombres ilustres (hoy divididos entre el Louvre y Urbino), pintados por Justo de Gante y Pedro Berruguete. En esta pequeña estancia la acumulación anecdótica flamenca se combina con la obsesión italiana por la pureza geométrica. Se trataba de reunir a personajes ilustres en una síntesis típicamente humanista. La elección de yuxtaponer poetas y filósofos, políticos y hombres de Estado, simboliza también la unión entre la vida contemplativa y la vida activa, elementos en los que se fundaba el despotismo ilustrado de Federico de Montefeltro. En este lugar refinado y racional, se exalta su gran personalidad.
Guidobaldo da Montefeltro (1472-1508), hijo y heredero de Federico, fue educado en la corte de Urbino por intelectuales como Ludovico Odasio y Ottaviano Ubaldini (este último primo y tutor del joven duque, durante su minoría de edad hasta 1482, cuando asume el gobierno del ducado) y por el matemático Luca Pacioli.[5] En 1489, Guidobaldo contrajo matrimonio con Elisabetta Gonzaga hija del marqués de Mantua.
“Es en la corte de Guidobaldo donde tendrán lugar los famosos cenáculos que Baldassarre Castiglione durante su estancia en la refinada corte de Urbino, evoca en su libro “El Cortesano”. Además de Castiglione, otros huéspedes ilustres residirán en el célebre palacio en forma de ciudad construido por Federico da Montefeltro. Por ejemplo, Pietro Bembo, muy conocido en aquella época en otras cortes italianas como la de Ferrara: poeta y hombre de letras, difusor de las obras de Petrarca, aboga por el uso de la lengua italiana en literatura en lugar del latín, y el cardenal Bibbiena, mecenas y diplomático al servicio de los Médicis en la corte de Urbino. En este ambiente altamente innovador de los primeros años del Cinquecento, Urbino es considerado ya como un prestigioso centro artístico, donde empieza a despuntar el genio de Rafael, hijo del pintor de la corte Giovanni Santi. El joven será llevado hasta las más altas esferas del arte por la familia ducal, quien lo presentará a sus futuros mecenas florentinos”.[6]
Fuentes y referencias.
[1] Sobre esta familia, Tommasoli, W. (1978). La vita di Federico da Montefeltro:(1422-1482): Argalìa; Pernis, M. G., & Adams, L. (1996). Federico da Montefeltro & Sigismondo Malatesta: the eagle and the elephant: P. Lang y, Kirkbride, R. (2008). Architecture and memory: the Renaissance studioli of Federico de Montefeltro: Columbia Univ Pr.
[2] https://www.aparences.net/es/arte-y-mecenazgo/el-mecenazgo-en-urbino/armas-y-letras-urbino-bajo-federico-da-montefeltro/
[3] Ib.supra.
[4] Albelo, J. (2017) Op.Cit.
[5] https://www.aparences.net/es/arte-y-mecenazgo/el-mecenazgo-en-urbino/la-corte-de-urbino-y-guidobaldo-da-montefeltro/
[6] Ib. Supra.